Santiago del Saltillo, 25 de febrero de 1682
"Pudimos hablar con Estefanía Hernández, esclava mulata, madre de Rosa María 'de edad de un año y dos meses poco más o menos' a quien don Nicolás de Ovalle y doña Maria de Peña, su mujer, vecinos de esta villa, otorgaron escritura y carta de libertad hace pocos días.
" '-Ha sido para mí una buena noticia -' declaró Estefanía. Todo se lo debo a los señores a quienes pertenezco desde que ellos desposaron. Agregó.
"Interrogada sobre este particular, declaró: ' -Los he servido siempre con dedicación y empeño y ellos en premio 'a la buena obra' de mis servicios, han decidido darle carta de libertad a mi hijita.'
" -Ultimamente - agregó - me prestaron a don Nicolás Guerzo, vecino y mercader de la ciudad de Sna luis, quien pagó para completar la libertad de mi hija, por mis buenos servicios en sus propiedades, 'Doscientos pesos de oro común en reales', con lo que mis amos' se han dado por contentos y entregados a su voluntad y satisfacción', concluyó Estefanía.
"Por su parte, los señores De Ovalle declararon a esta Gazeta: 'Otorgamos y damos libertad pura y mera irrevocable para siempre damos a Rosa María mulata ... hija de Estefanía Hernández mulata, nuestra esclava..' "
AMS, PM, C 3/1, E 48, D 4
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